jueves, septiembre 16, 2004

El falso patriotismo televisivo

Moda con un moño tricolor

La celebración mexicana de la lucha independentista de 1810 es quizás la más festiva de las que se celebran en el mundo.




Llegado septiembre, el mexicano desempolva los motivos patrios, adquiere a como dé lugar una bandera de cualquier tamaño, y hace manifiesta su nacionalidad, los "viva México" están a flor de piel y no hay más mexicano que uno mismo.

En plena fiesta del 15, el mexicano agrega a esa motivo, los platillos regionales y la bebida ad hoc para el momento, tequila, mezcal y una "mexicanísima" cerveza.

Nadie duda tampoco, que las consecuencias del festejo, sean un puente que disminuye la productividad del país, algunos muertos, decenas de peleas familiares y varios males estomacales.

La fiesta, es aprovechada por las cadenas televisivas, para sacar un falso patriotismo y vender a manos llenas la publicidad que se enmarca en los "programas especiales" alrededor de la "independencia" y del tradicional grito presidencial.




La televisión arma un tinglado para su falso patriotismo y aprovecha para, además de invadir de comerciales de productos extranjeros, llenar los espacios musicales con promociones con fuerte interés de las cadenas.

Televisa, pone a las estrellas del momento a cuadro, y hace su fiesta con chicas que salieron de la nada, completamente desconocidas y ejerciendo una extraña profesión llamada "conducción". Labor que realiza también TV Azteca.



En su caso, la televisora de Chapultepec 18, puso a cantar por ejemplo a Alicia Villarreal, que aprovechó para cantar temas de su nuevo disco (nada patriota porque llama a las mujeres a combatir a los hombres), y en los avisos, la cadena ponía de fondo una pieza ranchera del puertorriqueño Luis Miguel, estrenada el mismo 15 de septiembre en el más indigno trato a los mexicanos que tuvieron que tragarse la pieza payoleada en todas las radiodifusoras.

TV Azteca no se queda atrás, invertidos miles de pesos, pero ganando millones, exprimió a los egresados de un concurso llamado La Academia, así como las decenas de cantantes desconocidos que promueve para hacer competencia a Televisa.

Televisa hizo un intento mínimo, aprovechando las concesiones que le regaló el gobienro, enlazó a una gran parte de sus repetidoras en diversas partes del país, pero no hizo más.



Ambos casos manifiestan una deshonestidad evidente, no hay una pizca de cultura en los festejos, pasan de largo las raíces y se remiten a dar al televidente moda vestida con un listón tricolor.

La fiesta sería honesta, real y atractiva, sin tener que conocer las opiniones de Paty Chapoy o Adal Ramones sobre el nacionalismo, están de más las voces chillonas de las chicas "llame ya" y que en algunos casos son extranjeras, y también está de más para el televidente que le metan a todo volumen los últimos hits del momento que nada tienen que ver con la celebración.

Es finalmente, opción del televidente seguir la manipulación, y hacer la elección inteligente de lo que quiere ver, incluso en los momentos que festeja "su independencia".

No hay comentarios.: